desde el micro se difunde la fe |
EL
APOSTOLADO DE LOS LAICOS
Hay
que decir como nota previa que son pocos los laicos que hacen apostolado y no es porque no quieran, muchas veces es porque
no saben como hacerlo y porque han recibido rechazo de los ateos o apartados, cuando intentaron hablarles
de Dios. Incluso en la propia familia les tapan la boca, nada más hacer una reflexión un poco sobrenatural
Dicho
esto, veamos como se puede reactivar el apostolado de los laicos:
Debieran
conocer las diversas actividades de la ciudad en las
que pueden participar y
encontrar gente distinta de la que suele
ir a misa en las parroquias. P.e. hay bastante auge de corales tanto en la
ciudad como en pueblos pequeños. Es un entretenimiento en donde pueden
contactar con gente de todas las edades.
Además de cantar, se hacen amistades |
También
hay diversos colectivos como asociaciones de padres, centros sociales con
clubes de lectura, pintura, cine, deporte, baile etc. Ahí pasa bastante gente y
se le puede tratar.
Están
muy en boga los equipos de baloncesto y fútbol. El entrenador puede hacer mucho
con los chicos. Habría que entrar en esos circuitos de mucha gente joven.
Conozco
una persona anciana en edad pero joven de espíritu que hace apostolado en
comercios que tienen empleadas a chicas
o en el corte inglés o incluso en los hospitales con los médicos y enfermeras.
Empieza por una pequeña alabanza de las cosas positivas que ve y de allí va
pasando a temas más profesionales y en seguida a Dios. También les escucha
mucho y le da soluciones humanas y divinas.
Aparte de tener vida interior, y cosas que
decir, no se puede entrar directamente a
hablar de Dios pues provoca en muchos casos rechazo, sino que hay que llegar a través de un puente en donde se coge
un terreno en común como puede ser la moda, la cultura, hechos de reciente
comentario en todos los ambientes, Anécdotas personales, pequeños
descubrimientos en la Palabra de Dios… De ese terreno común se pasa, en seguida,
a la necesidad de tener una buena conciencia, o de tener en cuenta lo que Dios
ha dicho y dice.
También
a veces se puede usar una palabra que los amigos desconocen, tomada de la liturgia o del griego (shemá,
berakhá etc ) y entonces les entra curiosidad y preguntan y es el momento de
explicar.
Creo
que es un defecto hablarles de primero de ir a Misa o del pecado o del
infierno. Eso viene después. Conviene hablar del amor de Dios, de su grandísima
misericordia, de los grandes
interrogantes del hombre y luego ya vendrá lo otro.
Víctor
Manuel Sánchez Lado
No hay comentarios:
Publicar un comentario