D.Simón, conocido por sus publicaciones en en este blog, me envía esta nota-testimonio sobre la vida ejemplar del sacerdote D.Ramón Viña Varela. Hoy, hace 26 años, fallecia en la Coruña.
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Conocí a D. Ramón en el Seminario de Santiago. Era del curso anterior al mío. Sintonicé con él por la alegría que siempre infundía a su alrededor. También porque parecía saber bastante Historia y a mi me gustaba ya la historia -maestra de la vida –, aunque tenía pocos conocimientos por el lugar incomunicado donde nací.- Boqueixón.
Nació D. Ramón en Golmar el 6-10-1933. Se ordenó sacerdote el 28-1960. Parroco de Vilariño y Presaras desde 1962; y falleció, el 8-09-1994 en El Burgo- A Coruña-
Yo me ordené en 1961 y me fuí a estudiar en septiembre a La Universidad de Navarra. Estoy seguro que desde allí me comuniqué con él por carta, dada la amistad adquirida entre los dos.
Se encontró con una zona muy sana, pero mal dotada de infraestructuras, tanto él como su vecino D. Albino. Les fueron haciendo frente como pudieron pero espiritualmente muy piadosas.
Por lo que me contaron a D. Albino y D. Ramón les cogió una tormenta
REZANDO EL BREVIARIO QUE LUEGO CAMBIARON POR EL ROSARIO, En un río cruzando a CIUDADELA EN LA ZONA DE SOBRADO.
Por lo que pude comprobar D. Ramón se volcó en promover desde el Ayuntamiento de Vilasantar, accesos de pistas a todas las aldeas sobre todo de Vilariño y también de Presaras.
Llegó a la parroquia en un bus desde Coruña. Según me contó, vino escuchando a la gente por el camino y le llamó mucho la atención de que hablaban de una determinada persona de allí había llevado la vaca al toro al Hospital. Y dijo para sí: que adelantados están aquí que hasta llevan las vacas a un hospital. EL HOSPITAL, resultó llamarse así un lugar de la Parroquia de Andabao
En las primeras vacaciones de verano vine a Galicia. Tenía muchas ganas de verle. No tenía medios de locomoción. Se lo dije a D. Pedro Gutiérrez (Kirru) y me dijo ponemos un día y te llevo. Fuimos. Tengo fotos de la Casa Alquilada y la adquirida como Rectoral.
Hace unos días una sobrina mía de Bilbao (Charo), me mandó dos fotos de casas. Allí había venido para concretar su boda, que fue en la Catedral de Santiago. Las dos casas eran las de Presaras: una la alquilada por el cura y la otra un ángulo del pazo, donde ya vivía el Sacristán, y que estaba esperando adquirir por donación de la abuela de un sacerdote, llamado Buide de Santiago.
Pasadas mis estancias en el Seminario Menor de Santiago, desde el 1963 al 70 y estando hasta el 75 en Oleiros de Riveira. Y habiéndose enterado de que había una movida de Promoción del Medio Rural, desde las Escuelas Familiares Agrarias, me interesé por ello y llamé a mi buen amigo D. Ramón Viña, unas charlas de Formación Cristiana a la gente de Oleiros, previendo su éxito seguro por su modo de decir y hacer.
Casa adquirida para rectoral de Présaras por D.Ramón. |
Al fín D. Ramón se marchó de Vilariño y Presaras a Santiago del Burgo.A Coruña. Porque ya se iba haciendo mayor y se acercaba más a su tierra. El Burgo estaba en un período de crecimiento demográfico, industrial... muy grande. Tenía y tiene una Iglesia Románica estupenda pero muy pequeña y la Iglesia del Temple, igual. Se planteó qué hacer. Fué adquiriendo Bajos para multiplicar así la atención a la gente.
Después fue retrocediendo todo. Los sacerdotes fueron disminuyendo. La gente disminuyendo y la religiosidad bajando. El actual Párroco, creo que se fue deshaciendo de los bajos también, porque la economía también priva. Tal vez debiera estimularse más la formación cristiana desde la vía digital, sin abandonar la presencial – claro está también-, en las circunstancias actuales.
EL ASUNTO DEL CEMENTERIO:
Era una de sus grandes preocupaciones. Me consta. Consiguió hacerlo con grandes preocupaciones y sacrificios. El Constructor lo animaba. Tenían mutua confianza. Eran de la misma tierra de la zona de Carballo. Era un señor muy espléndido. Hizo muchos cementerios en tiempos de D. Salvador Ares. Hizo la 2º Ampliación del Cementerio de San Pedro de Visma. Asunto que recogí yo como herencia a la muerte de D. Manuel Otero Gómez, continuada por el entonces Presidente de la Asociación de Vecinos, que casi me pillan en un encierro con la entrega de los títulos ya adjudicados, pero no entregados todavía, cuando yo fuí para San Pedro de Visma.
En esta situación de empatía, amistad y ayuda mutua nos situamos en el 8-09-1994 fecha de su fallecimiento. Desde una temporada ya anterior se notaba su decaimiento físico. Estaba con tratamiento de diálisis. Me llamó un día, para decirle una misa en uno de esos bajos que había adquirido. Lo hice con mucho gusto y recibí un mensaje diciéndome si podría pasar por su casa después. Lo hice. Estaba su sobrina en casa también.
Me dijo que quería que yo estuviese presente, porque había quedado de venir el Constructor del Cementerio, y no sabía lo que quería decirle. Pensé que sería por cuestión del Cementerio y una posible ampliación. Total cuestión de dineros y firmas. No se presentó en ese momento. Pero después sonó la campana de que algo debió haber. El Cementerio desde luego está ahí.
Por eso yo tomé la decisión de presentar la renuncia a la Parroquia, cuando vi que me caí al suelo fácilmente. La primera caída fue precisamente en las escaleras del nuevo cementerio de Visma. Lo primero que pensé es que: allí hay cola para entrar y no para salir.
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