necesitaban soledad

Esta Vez había peregrinos de México, Canadá, Argentina, Rumanía y desde luego de Italia y España.

En la capilla del Pilar

Varios coincidieron en decir que deseaban caminar en soledad. Necesitaban estar solos consigo mismos y poder pensar en su vida. No siempre lo conseguían, pero también  agradecían la amistad que otros ofrecían. Uno dijo, en concreto, que tenía muchas preguntas acerca de Dios, que se las planteó durante todo el camino

También  coincidían en la sensación de gozo que sienten especialment

En la Cripta haciendo peticiones

e al llegar a la meta. Es como un abrazo interior que les da Dios.
Uno de Madrid vino a pie desde Barcelona y se pasa el día en la catedral y las noches se guarece en los soportales cercanos.


 Una peregrina que venía desde Oporto dijo que había aprendido a andar despacio , pues parece que, generalmente,  corre mucho. No sabe si le durará su propósito, comentó. Otro dijo que había aprendido a ser paciente ante las dificultades. A otro más le costaba mucho el camino, pero recibió el ánimo de  muchos, especialmente de una monja en un albergue que le alentó a seguir adelante,  sin rendirse.

Estaban también dos jóvenes rumanas , ortodoxas,  de quienes nos sentimos especialmente hermanos.
En el capítulo de las peticiones ante el sepulcro del Apóstol, pidieron por algún enfermo, por los propios peregrinos y para que los interrogantes del Camino tuvieran respuesta.

Haciendo una acto de fe , personal, sobre la Biblia. Tiene indulgencia plenaria este Año de la fe.

En el pórtico de la Gloria , todo el grupo

Con los italianos

a.