lunes, 22 de octubre de 2018

Las Clarisas reparadoras de Vilar De Astrés (Ourense)



En Vilar Dastrés, cerca a la ciudad de Ourense,  se ha dedicado, con toda solemnidad,  la iglesia y el altar del monasterio de San José.



En este caso no se parte de otro antiguo, sino que todo es nuevo. Es nuevo el lugar, el edificio para las religiosas, la iglesia conventual, los jardines y todo lo demás.

La iglesia es una iglesia moderna, con bonitas vidrieras, con un ambón y altar muy de la tierra gallega y luego unos jardines con maravillosas  vistas.

Es de una congregación llamada Clarisas reparadoras. Vienen de Santa Clara y San Francisco pero tiene el carisma de la reparación ante el Santísimo. Reparación a los corazones de Jesús y María.

 El templo tiene como patrono a San José. Los hábitos son de franciscanas con el cordón y además tiene grandes rosarios colgados de dicho  cordón. Son unas 12 más o menos, por lo que pude ver.

El ambón
Fui con un amigo sacerdote, D. Gabriel,  buen conocedor de la zona,  que me iba explicando esa Galicia , sus montes y sus pueblos, un tanto especiales . Hasta los nombres de los pueblos son llamativos: Amoeiro, Loureiro, Cea etc. Cerca quedaba Trasalba con un museo de Otero Pedrayo que nos quedamos con ganas de ir a verlo.

Presidió la ceremonia Mons. Leonardo Lemos Montanet, Obispo de Ourense. Estaban en el presbiterio  que, para los del románico,  representa el Cielo, unos 50 sacerdotes bastante jóvenes, y seminaristas y diáconos.

También asistieron religiosas de los ancianos de Santa Teresa Jornet y otras religiosas  con sus hábitos peculiares, para mí,  desconocidas.

El ritual se llevó con detalle.  Tiene   muchos símbolos que llevan a ver el recinto como un lugar para la Palabra y  el encuentro con Dios. Vale la pena verlo en directo.

Editaron dos folletos uno con la doctrina vigente sobre la dedicación de una iglesia y altar y otro con la liturgia y oraciones, este a todo color.

Al final hubo un ágape al aire libre,  muy del gusto de los gallegos. Queso, tortilla, jamón, empanada, todo presentado con arte.

 Había variadas  bebidas. Todo esto, completó la alegría de la  dedicación de la Iglesia y altar.

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