Al salir del templo de S. Cayetano me encontré con la Biblia abierta por los salmos. En uno de esos salmos busqué a ver qué me salía
en el primer versículo que señalara con el dedo sin saber de qué iba. Y en este
versículo leí. No andan por los caminos del Señor, los
malvados.
Luego salí a la calle y fui pensando en el mensaje de ese
trocito de la Palabra de Dios. Y creo que son malvados los que no aman. Por tanto
los caminos de Dios son los caminos de la fraternidad, de la amistad, del amor.
Las iglesias están vacías.
A veces va una persona o dos, otros días
mejores pasan 4 ó 5. Son unas iglesias en soledad. Los amigos de Jesús no
aparecen, aunque tal vez desde lejos le hablen y le recen. Pero son un bonito símbolo
de lo que debe ser la amistad.
Me parece que, esas iglesias vacías, y no de Dios, son la imagen de muchos cristianos. Tienen a
Dios, pero no tienen hermanos, están
solos. Esa presencia de Dios que es amor,( basta mirar una cruz, para convencernos),
no se difunde, no llega a los gestos, a
las palabras y a las acciones. Es un amor tibio que quizá está en un segundo
lugar. Eso, no es andar por el Camino del Señor.
Pienso que estos tiempos de encierro justificado, son
propicios para vivir la amistad, o para mejorarla. No nos quedemos solos. Al Señor le gusta que
tengamos el alma llena, igual que le gustan las iglesias rebosantes de fieles,
sus amigos, de 100 le interesan los 100.
¿cual es el signo de esa amistad?
Si recibes Watsapps o llamadas telefónicas, es una buena señal. Esos son amigos, pero si
no recibes nada de tus amigos, es que son poco o nada amigos.
Esta es una buena ocasión para afianzar las amistades o
renovarlas haciéndolas más vivas.
Cuantas alegrías podemos dar haciendo una
simple llamada por teléfono,y así el Jesús que está en nuestra alma en gracia y como en un templo, se verá muy bien acompañado con nuestros amigos y no en soledad.
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