Conferencia dada por el Sr. Dr. José Carro Otero
Santiago de Compostela 14 de agosto de 2015
Con una pequeña introducción histórica
comenzó su conferencia el Dr. José hablando de los pocos estudios que existen
hoy en día sobre la peregrinación de la mujer en el Camino de Santiago, que
desde inicios del siglo XIII tiene lugar la documentación histórica de los
peregrinos hacia Santiago (lo que no quiere decir que iniciaron mucho antes).
Luego, poco a poco, comenzó la expansión peregrina incluyendo
ya mujeres que hacían el Camino.
El Dr. Carro señaló, además, que en las
primeras peregrinaciones había mucha escasez de mujeres, ya que se les consideraba
como personas débiles y que tenían que estar al cuidado de la casa y de la
familia. Sin embargo, con las primeras alianzas que se realizaban entre
peregrinos, la mujer poco a poco fue aumentando su presencia, pues ya se sentía
en un ambiente seguro y protegida.
La primera referencia tomada en la
conferencia por el Dr. Otero fueron cuatro de los 22 milagros que se narran en
el Códice Calixtino. En concreto los milagros 3, 6, 16 y 21.
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Milagro 3: trata sobre un
matrimonio que realizó el Camino como impetración para pedir un heredero, pues
la mujer se encontraba estéril. Al terminar la peregrinación el Apóstol
Santiago les concedió el heredero. Así que una vez crecido el niño, realizaron
una vez más el Camino como signo de agradecimiento; pero durante el trayecto el
niño muere; por lo que la pareja recrimina al Apóstol y Él lo resucita.
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Milagro 6: Debido a una peste,
un peregrino decide realizar el Camino con su mujer y sus dos hijos, durante el
camino francés la mujer muere; pero el hombre decide continuar el camino
ayudado por un extraño personaje que al final de la jornada resulta ser la
intervención del Apóstol Santiago.
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Milagro 16: Habla sobre tres
caballeros que durante el camino se encuentran a una mujer anciana y a un
enfermo, y uno de los caballeros ofrece su montadura para ayudar a los
misteriosos peregrinos. Al llegar a Santiago, dicho caballero cae enfermo y el
Apóstol Santiago se le aparece para devolverle la salud por la bondad mostrada
a las personas durante el camino.
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Milagro 21: Un peregrino
tullido (extremidades encogidas) hace el camino con su mujer que lo cuida
durante todo el viaje; al llegar a Santiago, después de la tercera vigilia, el
hombre es curado milagrosamente.
En todas estas figuras la mujer permanece
siempre en el anonimato, pues no aparecen sus nombres; pero puede resaltarse,
excepto en el milagro 16, la intervención de la mujer en el cuidado de su
familia y como realizaban estas peregrinaciones juntos.
La segunda parte de la conferencia hablaba
de los tipos de peregrinas que existieron durante la Edad Media. Prácticamente
eran dos categorías: las de clase baja y las de clase alta.
Referente a las peregrinas de clase baja,
Don José Carro mostró varios ejemplos, entre los que se encontraban frescos,
imágenes encontradas en diferentes libros de literatura y pórticos que
reflejaban a la mujer peregrina de clase media-baja con un velo que le cubría
su cabellera y siempre en compañía de su familia.
Luego al referirse a la realeza, se hizo
una breve reseña de las más importantes personalidades que habían realizado la
peregrinación; entre las que se encontraban: la de Alfonso III el Magno y su
esposa Doña Jimena en el año 899. La de Doña Sancha, esposa de Fernando I.
Varias princesas, especialmente francesas. La de los Reyes Católicos de España
Fernando e Isabel que construyeron la casa donde fue realizada la conferencia
en el siglo XV. La de Catalina, hija de la Reina Isabel, durante el año de
1499. La Doña Mariana de Austria en 1668. Entre otras.
Se presta especial relevancia a las
ofrendas que cada una de estas personalidades realizaron al Apóstol Santiago,
entre las que se encuentran: cruces de oro, cálices y copones, cornucopias,
etc.
Una mención especial tuvo, en la conferencia,
la Reina Isabel de Portugal como una de las peregrinas santas de la realeza.
Que en el año de 1325 enviudó
de su esposo y poco después realizó un viaje de peregrinación a Santiago de Compostela, ingresando a su
vuelta en el convento de Santa Clara-a-Velha en Coimbra,
que ella misma había fundado, donde tomó el hábito de las clarisas,
pero sin hacer los votos de la orden, lo que le permitía mantener la
administración de su fortuna, que dedicó a las obras de caridad.
Al final de la conferencia, se habló acerca
de “las miserias” que se presentan en el Camino de Santiago por parte de las
mujeres; entre ellas se puede mencionar la prostitución, que se da en algunos
tramos del Camino, donde la mujer busca seducir a los peregrinos; además de
otras en donde la mujer es víctima como el acoso sexual y las violaciones.
La conferencia buscó presentar un panorama
histórico de la peregrinación de la mujer a Santiago, lo que permite ver que a
pesar de tener sus limitaciones, ha estado presente en la historia del Camino
de Santiago.
José Manuel Salazar Carranza
Seminarista Salvadoreño
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