Con esas palabras me contestó una catequista cuando le
comuniqué que no había catecismo ni misa los domingos próximos. Por causa del Corona virus,
Ante esta noticia negativa, saca una conclusión positiva. Rezaremos más. Vamos a estar más
tiempo en las casas pues toda actividad
está suprimida por razón del peligro de
contagio del corona virus, y por tanto podremos rezar más y con más intensidad.
Es lo que nos pidió el Papa y distintos obispos. Rezar,
rezar, rezar. Por los que murieron y sus familias, por los contagiados y por
los sanitarios que están haciendo horas extras. Claro y también por cada uno para que no nos contagiemos y
podamos seguir en nuestros trabajos.
Están llegando por internet diversos planes para ayudarnos a
la oración. Puede buscarse en la radio la
emisora Radio María que a lo
largo del día nos facilita la oración o la formación.
Cuando el pueblo de Israel fue atacado en el desierto por
las serpientes venenosas, acudió a Moisés
que en un palo le pone una serpiente de bronce, tal como mandó Iahveh. ( era la figura de Cristo en la Cruz) Y los que hacían
oración mirándola curaban.
El gran
remedio es tener humildad, reconocer
nuestros pecados y pedir misericordia. Al fin, Dios nos quiere y nos corrige
para que vivamos felices.
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