Una familia navarra en Ucrania

 

  una de las muchas famlias en mision

Javier, Ana y sus hijos viven en Rivne (Ucrania), a donde se trasladaron como familia en misión. Les tocó en suerte ser enviados a ese país por el camino Neocatecumenal.

Tengo especial querencia a Ucrania pues hace años que hay personas que siguen desde Ucrania este sencillo Blog.

Esta familia compuesta del matrimonio y 5 hijos, y otro en camino,  tiene que  luchar por ganarse el pan,  por pagar la casa, en definitiva, por sobrevivir.  En esta situación no te puedes permitir perder el tiempo con algo que todavía no ha pasado y no depende de uno mismo, dice Javier.

El matrimonio está en actitud de espera pero con la confianza puesta en el Señor. “la verdad es que nuestra primera reacción fue la del egoísmo. Pensamos: si pasa algo nos vamos y ya está, reconoce Ana. Pero luego nos entregamos a la oración y Dios nos hizo ver, a través del Evangelio, que debíamos rezar por lo que está ocurriendo, pero no tener  miedo”.

Un día decidieron abrir la Biblia al azar y se encontraron con el pasaje de la Magdalena en el sepulcro: Vosotros que buscáis a Jesús, no tengáis miedo. A partir de ahí, nuestra actitud cambió. Además hay que tener en cuenta que hemos venido como familia en misión y hay gente que se ha acercado a la Iglesia gracias a nuestro testimonio.

No podemos abandonarlos a las primera de cambio dice Ana, que está  embarazada del sexto hijo.

Me parece interesante el difundir la vida de estas personas que son capaces de hacer el bien, en situaciones de gran dificultad y son un ejemplo para todos nosotros.

nota:

Vais con un mandato para evangelizar a los no cristianos, que jamás han oído hablar de Jesucristo, y a los muchos no-cristianos que han olvidado quién es Jesús”, les dijo el Papa. Francisco explicó que se trata de cientos de miles de “no-cristianos bautizados a quienes la secularización, la mundanidad y muchas otras cosas han adormilado la fe. ¡Despertad esa fe!”.“El mundo necesita urgentemente este gran mensaje: ¡cuánta soledad, cuánto sufrimiento, cuánta lejanía de Dios”, ha añadido.

A día de hoy el Camino Neocatecumenal ha enviado unas 1.100 familias de misión a decenas de países. Muchas van también a Europa, a ciudades de Dinamarca, Suecia y Finlandia, o de Hungría, Bosnia y Kósovo.

Las familias en misión del Camino Neocatecumenal “acuden a las diócesis del mundo en las que los obispos de esos lugares han pedido su presencia para que den testimonio de la familia cristiana y colaboren en el desarrollo de la Iglesia”