Se dirigía sin rodeos a la conciencia de los oyentes.

Aun no había comenzado la conferencia

Con motivo del patrono del Clero español, S. Juan de Ávila,  el Sr. Arzobispo D. Julián Barrio tuvo una hermosa conferencia en el  aula magna del ITC, llena de sacerdotes que venían para celebrar a su patrono.

Dijo que prefería no dar él una conferencia sino más bien dejar hablar al maestro Ávila.

Comenzó hablando de los obstáculos que encontramos en el camino. No   se debe retrasar  la resolución y atención a los mismos, y al mismo tiempo tener una visión favorable pues  todo se puede convertir en algo bueno. Desde luego para mejorar la sociedad lo hacemos cambiando nosotros mismos.

D. Lino presenta el acto

S. Juan de Ávila orientó a obispos, a sacerdotes, a santos y hoy también sigue haciéndolo.  Sigue siendo actual porque vivió la hora de Dios y eso no pasa. Tuvo algo importante que fue testimoniar con su vida el Evangelio. Doctrina y vida en este santo van unidas.

Mos. Julián Barrio, en el centro , dando la conferencia

El éxito de sus sermones era extraordinario. Convertía almas a Dios; el que entraba como un demonio, salía como un ángel. Se dirigía sin rodeos a la conciencia de los oyentes. Así evangelizaba, con la Palabra de Dios, con su vida de oración y con su testimonio de caridad. Su consejo era: insistir más en la oración que en el estudio.

 Predicaba, sin buscar agradar a los demás, sino que pretendía sólo  la gloria de Dios. Si se pretende agradar a los hombres,  se hará decir a Dios lo que Dios no dice.

 Hay que decir las palabras en la persona de Cristo.Insistía, S. Juan de Ávila,  en vivir inmersos en la oración hasta estar enamorados del Señor. Y mediante la oración se consiguen bienes para aquellos a quienes predicamos.

Otro apartado es como es la santidad del sacerdote. Nos dijo Mons . Barrio que no es el mundo quien nos marca como es el estatuto del sacerdote, sino que es Cristo quien dice como es el buen pastor. Comparó  a los sacerdotes  con los hijos.¿ qué es mejor,  tener hijos  sabios o hijos santos?

Terminó hablando de las virtudes sacerdotales en los escritos de S. Juan de Ávila.

en el claustro de la catedral, preparándose para la Misa.