martes, 16 de febrero de 2021

Manuel Pazo Bujan, sacerdote

 



D. Manuel nació en Boimorto,  en una población llamada Dormeá, lugar hermoso y con historia; procede de  una familia cristiana y numerosa en la que fueron muchos hermanos. Tuvo un hermano que también fue sacerdote, D. Antonio, y que falleció en el año 2014.

D. Manuel se ordenó en el mes de agosto de 1960 en el seminario de Santiago en donde hizo sus estudios.

Su primer destino fue en Santiago, en la parroquia de S. Juan en la que era párroco D. Perfecto Vilas Figueiras, ahí estuvo dos  años y luego en 1962 pasó de párroco a Santa María de Arzúa, mas tarde le encargaron de Villadavil.

 En el año 1984 fue nombrado párroco  de Santa Cristina de Barro en donde pasó la mayor parte de su sacerdocio hasta su jubilación. En 2004 le encargaron de administrador parroquial de Santa María de Roo, una parroquia vecina.

Santa Cristina de Barro está al lado de Noya, y mira al mar. Ahí D. Manuel puso mucha ilusión en su trabajo pastoral, sobre todo con los niños en el catecismo y con gente joven.

 De esa parroquia salieron tres vocaciones al sacerdocio, siendo párroco D. Manuel Pazo: D. Juan Benito Insua Insua, D.  Juan Carlos Martínez ahora en la parroquia de Cuntis y D. Carlos Carou, ordenado en Cuenca y  que  ejerce su sacerdocio en Toledo, en la iglesia de el Salvador.

La casa y la Iglesia están en unas situaciones inmejorables y bien cuidadas. Alguna de sus hermanas le acompañaban y cuidaban en el tiempo de, al menos,  el verano.


 

D. Manuel  era acogedor, sencillo y le gustaba la conversación.

 Fui en una ocasión a verle acompañado de dos seminaristas, quería presentárselo y  me interesaba que conversaran con él,  para que conocieran su pastoral.

 Recuerdo que sus hermanas nos invitaron a tomar algo a lo que unánimemente dijimos que no, pero no nos hicieron caso y, al poco rato, pusieron sobre la mesa dos platos de buen jamón recién cortado. Los  chicos, que eran jóvenes, dieron buena cuenta del jamón que lo comieron en menos que canta un gallo.

Marchamos de allí satisfechos y hablando de la generosidad de los curas gallegos. Los seminaristas eran de centro américa y estaban estudiando teología en Navarra y en el verano hacían practicas de pastoral en S. Cayetano.

Estaba D. Manuel muy encariñado con la parroquia de Barro y le costó un poco de trabajo dejarla por la  jubilación, pero luego optó  por pedir la jubilación y se retiró a Santiago a la Rúa de San Pedro,  en donde le cuidaba su familia.

Allí le visitamos algunos compañeros de curso y tuvo la ayuda espiritual de un sacerdote salesiano.

Su muerte fue en casa, casi sin notarse. D.E.P. falleció el 15 de febrero de 2021 y fue velado en el tanatorio de Boisaca para hacer su entierro en su tierra natal  en la mañana del martes  16.

 La  familia está a la espera de un tiempo oportuno para hacerle un funeral. En S. Cayetano le aplicamos una Misa el mismo día de su entierro y sus compañeros  y amigos, también le encomendaron, como suele hacerse.

 

Víctor Manuel Sánchez Lado

Párroco de S. Cayetano

2 comentarios:

  1. Facìa anos que non sabìa de D.Manuel Pazos Bujàn o que coñecin sendo cura de Santa Marìa de Arzùa alò pola dècada dos 60, con el fixen a primeira comuniòn e tamèn a confirmaciòn. Home dedicado con toda a alma a sùa profesiòn e vocaciòn, incansable, severo, inflexible e xusto. Recordoo aìnda na sùa moto e despois no seu citroen 8, sempre de sotana de pouca calma e revulindo dun lado para outro. A sùa marcha da parroquia despois de mais de 20 anos foi de sorpresa, sin despedidas e dedicaciòn ao novo destino. Non o imaxino xubilado e no retiro da sùa casa. Cheguei tarde para un reencontro con èl. Debolle unha oraciòn pola sùa alma e que DEP.
    Oswaldo Quintàs Souto

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  2. Facìa anos que non sabìa de D.Manuel Pazos Bujàn o que coñecin sendo cura de Santa Marìa de Arzùa alò pola dècada dos 60, con el fixen a primeira comuniòn e tamèn a confirmaciòn. Home dedicado con toda a alma a sùa profesiòn e vocaciòn, incansable, severo, inflexible e xusto. Recordoo aìnda na sùa moto e despois no seu citroen 8, sempre de sotana de pouca calma e revulindo dun lado para outro. A sùa marcha da parroquia despois de mais de 20 anos foi de sorpresa, sin despedidas e dedicaciòn ao novo destino. Non o imaxino xubilado e no retiro da sùa casa. Cheguei tarde para un reencontro con èl. Debolle unha oraciòn pola sùa alma e que DEP.
    Oswaldo Quintàs Souto

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