a la hora de comer
Hay un refrán italiano que dice eso: febrero corto y amargo, y es lo que se cumplió en la casa sacerdotal aunque también hubo cosas buenas. Al respecto dice Newman que en todo hay una llamada (de Dios), y, ver esa llamada, es tarea de cada uno y es bueno conocer su Voluntad.
Veamos pues algunas noticias de la Residencia:
El día 7 estuvo en la
Residencia, D. Pablo García Huidobro,
párroco de Santiago de Chile en donde es vicario de la Misericordia y párroco de
la parroquia de la Concepción que tiene unos 80.000 habitantes, casi como todo Santiago de Compostela. Vino a pasar unos días en Santiago, Sangenjo y en
Madrid. Fue muy amable con todos y muchos de los residentes aprovecharon el
momento de la comida para saludarlo y desearle
buen viaje.
Celebraron su santo, con todos, el día 13, D. Ricardo Bello Mato y el director de la Casa D. Ricardo Viqueira. Mucho ambiente y felicitaciones a la hora de comer. También hubo detalles importantes en la comida. Felicidades a los dos.
El día 18 fue el funeral en Turces (Touro) de D. Pedro
Montaña. Tuve noticia de varios sacerdotes que ofrecieron la Misa por él. Muchas gracias, en su nombre.
Desde que enfermó el Papa se pide por él todos los días en
el rosario y estamos pendientes de las noticias diarias. Dominus conservet
eum…Es uno de los temas de conversación entre los residentes.
Hace unos meses hice una pequeña encuesta con los residentes y una de las preguntas era “qué comida le gustaba más “. Hubo varias respuestas: la sopa de ajo, churrasco y pollo asado, huevos fritos con patatas, y, hace poco, nos pusieron a la cena, arroz con salsa de tomate y huevos cocidos que estaba impresionante. Hay que felicitar a las cocineras, incluido el Sr. Suso que viene sábados y domingos.
Hubo, en la encuesta, otras preguntas un poco más serias, pero las pondré más adelante.
Y ya por último sigue habiendo partidas de dominó prácticamente todos los días, lectura de periódicos y revistas que están a disposición de todos en la sala de estar y hay quien hace el crucigrama habitualmente, varios salen a la calle a dar un paseíto por las rúas, y otros se encierran en sus lecturas o con la Tele. Buena cuaresma para todos.