miércoles, 26 de abril de 2017

Un buen libro sobre Fátima






Un camino bajo la mirada de María
Primera reimpresión: marzo 2017
Edit. Carmelo de Santa Teresa. Coimbra.
526 páginas.

El original  de Un camino,  fue escrito en lengua portuguesa por las carmelitas de Coimbra en 2013.

La edición en lengua española  viene muy bien ahora que  estamos ya en el año Santo mariano y en el cumplimiento de las fechas del centenario de las apariciones.


No es un estudio de teología de Fátima, sino un relato muy completo de la vida de la hermana Lúcia y de su relación constante con la Ss.Virgen.

En el Carmelo  de Coimbra estuvo la hermana Lúcia más de 50 años, allí celebró sus bodas de Oro como carmelita. Las carmelitas la  conocían bien, sabían de su piedad y obediencia y de sus sufrimientos,  llevados con alegría y buen humor.



También ,   además de las conversaciones ordinarias,  disponen de muchas cartas que son citadas oportunamente  para confirmar  las diversas afirmaciones sobre su vida.

Hay que decir  que esta obra no se limita a repetir y confirmar lo que ya sabemos por otros biógrafos, sino que trae cosas nuevas, anécdotas y dichos que no son  conocidos por muchos.

También aparece, con delicadeza,  su interioridad y sus luchas por ser fiel a  su primer SI que le da  a la Ss. Virgen aquel 13 de mayo de 1017.

La biografía trata con detalle y con amor su tiempo de vocación a la vida religiosa con las Hermanas Doroteas (1925-1948), hasta su paso al Carmelo por motivos sobrenaturales.

Trae esta biografía cosas muy interesantes sobre su estancia en Tuy en donde tiene la visión de la Ss. Trinidad, una de las más teológicas, y también habla de su estancia en Pontevedra. Así mismo,  nos cuenta  su estancia por un mes en la Toja por razones de salud y la visita a la catedral de Santiago con motivo de un Año Santo.

Siempre que pudo,  dio catequesis en diversas parroquias cercanas tanto en Tuy como en Pontevedra. Es Pontevedra dio catequesis en  S. Bartolomé y San Francisco. Sus niños  sabían confesarse muy bien. Su afán apostólico queda patente en todos los momentos de su vida. Es un fuego que se comunica a su alrededor.

Tuvo unas visitas a Fátima muy emotivas y sigue insistiendo a tiempo y destiempo en la necesidad  de Penitencia y oración. Su actitud  ante el pecado es  de reparación y de llamar al pecador a la conversión pues el pecado no hace feliz a nadie.

Con ocasión de pequeñas contrariedades renueva  y se reafirma en su voto de pobreza. Quiere ver la mano de Dios en todo y sabe leer entre líneas.

Cuando ve como la escuchan tanto niños como mayores al hablarles de Dios dice que lo que atrae es lo sobrenatural.

Esta  biografía cuenta como comenzó la idea de llevar la imagen de la Virgen peregrina de Fátima por todo el mundo en ese momento, sobre todo en Europa,  destrozado por la guerra. Todo fue en una reunión internacional de la juventud en Gante.

Cuando tenía problemas o asuntos decisivos,  acudía al sagrario donde recibía la luz necesaria. También acudía a los respectivos obispos y  a la dirección espiritual,  buscando la voluntad de Dios por encima de sus gustos.

Por último nos cuenta con mucha cercanía su trato con los  sucesivos papas y los últimos momentos de su vida en el Carmelo. Un buen libro que vale la pena leer y meditar.


Nació  el 28-3-1907
Falleció el 13-2-2005

Víctor M. Sanchez Lado
Párroco de S. Cayetano

lunes, 24 de abril de 2017

El tirón de Fátima




Un buen grupo de peregrinos estuvimos en Fátima el 22 y 23 de abril. Visitamos en primer lugar Aljustrel en donde había numerosos grupos, yendo y viniendo. Algunos rezando el rosario en voz alta mientras caminaban al lugar de las apariciones del ángel o de la Virgen en agosto.

El pozo, visión del Angel
Había cierta soledad, pero acompañada.

Luego misa en español en la capeliña. Concelebraban un buen grupo de sacerdotes y también asistieron seminaristas. Éramos de diversos lugares de España.

Nosotros  fuimos citados como grupo de  inmigrantes de Santiago de Compostela. También estaba  la Efa de Arzúa con sus alumnas y amigas. Ya se nota el ambiente del Año Mariano y de la próxima visita del Papa pues  eran muchos los peregrinos incluso de India y paises lejanos.

Luego cena y rosario con procesión de antorchas. Cuando comenzó la procesión se llenó  la plaza de gente con sus velas encendidas. No se sabe de dónde salían, pero allí aparecieron miles de peregrinos. Hubo cantos, muchos cantos y la Virgen paseándose por medio de la multitud acompañada de sacerdotes con el alba y la estola blancas.

Una casa con historia
La procesión no es lo mismo verla que entrar en ella, y yo  con un amigo  entré en la procesión y me uní a los cantos. Al estar de vuelta cerca del monumento al Corazón de Jesús nos pusimos a un lado dejando pasar la procesión. Estaba allí  un matrimonio que también esperó el paso de la Virgen. 

Cuando ésta se puso a nuestra a altura la señora se puso a sollozar que no paraba, tanta fue la impresión que le produjo el  paso de la Virgen, y cuantos serían los sentimientos de ambos  corazones, del corazón de la Virgen y el  de aquella señora.

Luego fuimos un rato largo a la Laus peremnis en  donde está el Santísimo  expuesto las 24  horas y allí encomendé muchas necesidades al Señor,  convencido de que no caían en saco roto. En ese momento de la noche seríamos unas 30 personas y se respiraba silencio y  paz.

El Señor está en una “custodia “,  pobre y sin adornos. Había, eso sí,   flores,  velas y mucha luz.
Al día siguiente, domingo, Misa en el mismo hotel para el grupo y luego tiempo libre. Varios fuimos a ver el museo de cera.

Museo de cera, milagro del sol
El regreso a casa fue gozoso. Los peregrinos pudieron contar su experiencia de Fátima  y  de amor a María y algunos de los toques que Jesús les dio. Se cumple lo que dice el Evangelio de los Reyes magos que después de estar en Belén con  Jesús, José y María, vuelven por otro camino,  como les indicó  el ángel. ASI DIJO ALGUNO,  QUE SU VIDA HABÍA CAMBIADO. Volvía por otro camino.

¿Propósitos de mejora?.- sin duda, nadie quedó indiferente en la casa de la Madre. Y Ella sabe  los caminos de nuestra conversión.


Un trozo del muro de Berlín

miércoles, 19 de abril de 2017

Herminio Allo Castro, sacerdote.




Falleció el día  18 de abril en el geriátrico de Os Castros,  habiendo recibido la Unción de enfermos administrada  por D. José Manuel Iglesias Prado, actual administrador de S. Simón de Cacheiras. Siempre estuvo visitado y atendido por sus hermanas y familiares.

Su primer  destino como sacerdote fue Corcubión. Allí estuvo de coadjutor  del venerable y santo sacerdote D. Francisco Sánchez Gómez-Adanza, que era reconocido como un maestro en bondad y desprendimiento,  pues lo daba todo. Yo estuve allí después de unos años, también  con D. Francisco,  y la gente de Corcubión todavía  recordaba con cariño el paso por la parroquia de aquel coadjutor,  D. Herminio.

Luego lo recuerdo en la Sierra de Outes, en donde también fue muy querido por sus feligreses y compañeros sacerdotes que repetidamente lo eligieron como arcipreste.

 Se debe a él una amplia capilla construida en el centro del pueblo, que facilitó mucho la asistencia a la Santa Misa, pues la iglesia parroquial queda un poco alejada del núcleo del pueblo.

Le gustaba estudiar  y comentar los temas de la teología o bioética más debatidos del momento que él conocía en profundidad y luego predicaba con sencillez al pueblo.  Lo tengo encontrado en alguna ocasión paseando con otro  sacerdote de la zona y cuando me acerqué para saludarles, me explicaron que no estaban hablando de vanidades sino de alta teología,  cosa que yo creía que era así.

Últimamente se acercó a Santiago como párroco de S. Simón de Cacheiras  ( 1993-2010), en donde estuvo  mientras la salud se lo permitió. También  fue  repetidamente arcipreste, denotando el cariño de sus compañeros  sacerdotes. En el tanatorio le oí comentar a feligreses de Cacheiras que era Muy boiño. La gente de la parroquia hablaba muy bien de él.

Iglesia de Cacheiras.
  Luego, enfermó y  pasó a un geriátrico,  en donde también  pude visitarle y acompañé un tiempo,  dándole afecto,  que  eso lo entiende todo el mundo.

La diócesis perdió un buen sacerdote que fue fiel a Jesucristo y con el que se ha encontrado ya,  cara a cara y
definitivamente. Que descanse en Paz.

Nació en Suevos el 1-3-1930
Ordenado sacerdote el 19-6-1955
Falleció el 18.4.2017

lunes, 17 de abril de 2017

S. Roque y la peste




El Dr. José Carro dio una hermosa conferencia en la iglesia de S. Roque preparando los 500 años de la fundación de la capilla y del voto de Santiago.

Toda ella fue entorno al fenómeno de la peste y a la intercesión de S. Roque sobre todo en una época en que no había microscopio y no se sabía el proceso de la enfermedad. Ahora  ya se sabe y está todo muy bien estudiado en las facultades de medicina.

Calificó a S. Roque como protomédico taumaturgo, con poderes místicos.

 S. Roque  atendió a los infectados por la peste negra o bubónica, producida por una bacteria. Pero  esto se sabe desde 1894. Las trasmisión era a través de las picaduras de las pulgas; una sola picadura trasmite 100.000 bacterias.

Esta peste es gravísima y la padeció el mismo S. Roque. Luego se curó por los cuidados de un perro que le llevaba pan para alimento y le lamía las llagas. La saliva de los perros tiene propiedades curativas. Luego también tuvo los cuidados del dueño del perro que extrañado por el comportamiento del perro, encontró a s. Roque retirado en el bosque para no contagiar a otros.

Esta peste inflama los ganglios  linfáticos que hay en las axilas y la ingle que luego revientan y producen un gran dolor  y la muerte rápida.

S. Roque curaba a los enfermos con la limpieza y la señal de la cruz.

Luego el conferenciante se extendió explicando cómo los peregrinos tenían diversos distintivos. Los Romeros que iban a Roma, dos llaves cruzadas. Los palmeros que iban a Tierra Santa con la palma y los jacobinos que venían a Santiago, traían  en el ala del sobrero al venir con dos báculos cruzados y al volver añadían la concha de  vieira. Así eran reconocidos y les ayudaban en el camino. No eran bandidos.

San Roque fue  romero y su distintivo  eran las llaves de S. Pedro.
Profe.Carro y D.Jaime y D.Víctor

En Santiago llega la peste y se construye la capilla  a S. Roque  en las afueras de la  ciudad para que la peste no entre.  Se construye un hospital patrocinado por el arzobispo Francisco Blanco y al mismo tiempo se hace el voto a S.Roque pidiendo su intercesión.

 A continuación describe las procesiones del Cabildo y del Ayuntamiento que el recuerda de joven, y nos habla de cómo se extendía el culto a través de estampas y novenas. Las plantas,  si no las riegas se mueren, decía.