D. Francisco está pasando unos días en la residencia sacerdotal de Santiago y es párroco en activo de la parroquia de S. Bartolomé de Espejo. Está cerca de Córdoba.
Viene desde hace unos años a la Casa sacerdotal de Santiago en donde no sólo es conocido de los residentes sino también amigo.
Esta vez quiero darle las gracias a través de este medio y contar algo de lo que hemos hablado en una mini-tertulia.
¿Qué hay por Córdoba?
Estamos con la sinodalidad, nos dijo, y por tanto en la línea horizontal. Es bueno de que tratemos de estar unidos y trabajar juntos, pero no para adaptar la Iglesia a los gustos y criterios del mundo sino para convertir el mundo a la buena noticia del Evangelio, llevarlo a Dios.
Y ¿las cofradías?
Le preguntamos por las cofradías que según nos dijo están funcionando bien y sostienen la fe de los indecisos. Ahora son el rostro visible de la Iglesia y levantan grandes entusiasmos en muchos.
¿Qué tal está la Niña?
Esta es una pregunta que siempre le hago y que me gusta hacerle.
Contesta que en el barrio de Triana así le llaman a la Macarena y en Semana Santa la pasean por las calles (la Niña está en la calle, dicen) durante unas 11 horas y no se cansan de mirarla y de echarle piropos. El más frecuente es ¡¡¡ Guapaaaa!!!.
Muchas personas incluso no practicantes, ante el paso de la Macarena, se emocionan y conmueven visiblemente.
D. Francisco ha traído unas pocas estampas de la Macarena, pasadas por su manto que le agradecemos muy mucho.
Le deseamos una bonita estancia en Santiago.
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