martes, 29 de enero de 2019

Un gran milagro, que se repite



Ayer pude ver ,a través de internet, un encuentro de Kiko Argüello con más de 15.000 jóvenes en Panamá. Sucedía  después de la despedida del Papa.

Esos jóvenes no proceden de la calle, son del Camino Neocatecumenal, han tenido catequesis para adultos y tienen una formación intensa a través de distintos medios como  p.e. frecuentes celebraciones de la Palabra, penitenciales, convivencias etc.

El ambiente  era festivo como era de esperar de gente joven y sana. Les habló  Kiko del paso de Jesús en aquella hora y de cómo seguía llamando a seguirle. Animó a que si alguno escuchaba esa llamada que respondiera como María: Aquí está la esclava del Señor, hágase en mí según tu Palabra.

Luego habló el P. Mario desde su experiencia personal y remató una joven que colabora directamente en el  gobierno del Camino y que estuvo 20 años en Rusia implicada en la evangelización.

 Contó entre otras cosas que su vocación se concretó en la JMJ del Monte del Gozo en Santiago.

Como en otras ocasiones  Kiko, después de un canto y un momento de oración en silencio de todos los presentes, animó a los chicos que se sintieran llamados al sacerdocio a  que se acercaran al estrado; salieron unos pocos corriendo y luego como un rio de jóvenes que se acercaban con alegría y algunos claramente emocionados. En total unos 700. Yo estaba viendo un milagro.

 Estos  jóvenes,  hablarán con sus catequistas e irán discerniendo  la vocación. Recibieron de rodillas la bendición de un obispo  que presidia, probablemente un capuchino. Verlos es una gran esperanza y   esto mismo se ha visto con Kiko en más ocasiones. Irán  a parar a uno de los 120 seminarios Redentoris Mater  que hay esparcidos por todo el mundo. Aquí mismo en Galicia hay dos: en Ourense y en Lugo.

Luego llegó el turno a las chicas que se sintieran llamadas a servir totalmente a la Iglesia. Se juntaron unas 550.

Ya , por último, fueron invitadas las familias a ser “familias en misión”. Explicó  Kiko que les podría tocar  cualquier parte del mundo como China, Suecia, África o incluso Galicia en España. Aquí en Santiago hay varias familias, enteras,  colaborando en la evangelización.

Llamaba la atención verlas ir al estrado con sus hijos, alguno en brazos de su padre o de su madre. Es  también un momento de mucha emoción y de confianza en Dios que nunca abandona a los suyos.

No sólo es una alegría para el Camino, sino para toda la Iglesia que agradece y se goza en la generosa disposición de todos estos jóvenes del Camino. Gracias sean dadas a Dios, gracias, muchas gracias.  Dios sigue  de cerca a su Iglesia.
Víctor M.Sánchez Lado
Párroco de San Cayetano

1 comentario:

  1. Nosotros somos una de estas familias que se ha levantado y llevamos aquí en Santiago tres años. Trabajamos en la Parroquia de San Cayetano y de San Juan. Tenemos a siete hijos, los últimos dos, nacidos aquí en Santiago. Lo que podemos decir es que el Señor es fiel. Nunca nos ha dejado solos y gracias a las celebraciones de la palabra y de la eucaristía del Señor nos esta haciendo ver milagros. Nuestros hijos están súper contentos y el nuestro matrimonio días tras días esta haciéndose más fuerte. Ánimo el Señor nos ama así como somos sin ninguna reserva.

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