Tuve un profesor de teología que decía que los ejemplos eran importantes porque eran como perchas en
donde se colgaban las ideas. Sin esas perchas la doctrina generalmente se
pierde o se olvida. Haced la prueba a la salida de una misa y preguntad de qué se acuerdan o de qué habló el cura y veréis los resultados , solo se acordarán
de los ejemplos.
Me viene a la cabeza la historia de alguien que hizo eso y
le preguntó al primero que salía de que habló el cura y le dijo: de la
murmuración y, de nuevo, le preguntó y
¿qué dijo sobre la murmuración?, que no era partidario, esa fue la
respuesta un poco escueta.
Pues bien, tenemos estupendas perchas en la vida de los
santos. Ellos son testigos de la fe que han vivido y con sus vidas nos regalan
muchas enseñanzas.
¿Qué santos
estudiamos?
Pues pienso que
debiéramos conocer con detalle las vidas de los más cercanos, o de los
titulares de nuestra parroquia o el santo de nuestro nombre, si es que hay
santo que haya llevado ese nombre.
También hay personas que sin hacer nada especial fueron un
verdadero ejemplo y no podemos dejar de recordarlos. Yo tengo una pequeña lista
de gente que fui conociendo durante muchos años, muchos de los cuales ya
murieron y les hice santos en mi corazón y me encomiendo a ellos.
S. Vicente de Paul
ponía de ejemplo para sus monjas, a las mujeres de aldea: porque trabajan mucho, rezan mucho y no se dan importancia. Cuantas hay así, gracias
a Dios.
Santos populares
Hay santos muy
populares pero me temo que sabemos poco de sus vidas, tenemos pocas perchas,
como os decía. Estos santos son conocidos en todo el mundo desde Alaska hasta
Sudáfrica. Por ejemplo San Antonio de Padua o de Lisboa (como dicen los
portugueses), San Francisco de Asís, Santa Teresa de Jesús, San Ignacio de
Loyola, San Agustín, San Pio X y otros; incluyo en esos otros, a todos los Apóstoles. Pero ¿conocemos sus hechos, su vida que nos pueda
ayudar?
Las vidas de los
santos es una lectura bien recomendable y que ha hecho santos como es el caso de
S. Ignacio de Loyola que estando enfermo por motivo de una guerra, tuvo que estar convaleciente, y , al no tener
otros libros, leyó vidas de santos y al
ver sus heroicidades decía: si estos lo hicieron, porque yo no.
Santos seglares o
laicos
Ahora se están poniendo
de actualidad los santos que son laicos o seglares, algunos que fueron
casados como san Isidro Labrador y Santa
María de la Cabeza, patronos de la villa de Madrid.
Luigi y María |
También los esposos Luigi Beltrame Quattrocchi y María Corsini,
santos los dos y que están enterrados en el Santuario romano del Divino
Amore a los que se encomiendan los
casados. Yo pude hablar, por teléfono, con una hija de unos 90 años, que hace poco aun vivía.
Alexia |
Hay que conocer los santos locales.
Aquí en mi diócesis o
en España hay muchos haciendo cola para
ser beatificados como por ejemplo
Antonio Gaudí, arquitecto de la Sagrada Familia de Barcelona que ya es siervo de
Dios, o Montserrat Grases, catalana del Opus Dei, Eduardo Ortiz de Landázuri, médico
de Pamplona y que es siervo de Dios. José Pio Gurruchaga, párroco en Irún y
fundador de las Auxiliares Parroquiales.
Y otros relacionados con Galicia por ejemplo la joven Alexia González
Barros (sierva de Dios), sus padres eran de Soutelo de Montes. S Pedro de Mezonzo, San Rosendo, San Pablo Blanco , mártir en Japón. El Sacerdote Baltasar Pardal, gran catequista
y fundador de las Hijas de la Natividad de María, que muchos recuerdan, y la Madre María Antonia de Jesús,
carmelita, fundadora del Carmelo de
Santiago. No hay que olvidar a Fernando Olmedo, capuchino, del que hablé en este blog en varias ocasiones y que es de La Algalia en Santiago y va a ser beatificado en octubre con 500 mártires.
Supongo que estas listas quedan bastante incompletas, pero
dejo a los lectores que las completen
con sus comentarios.
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